El Poder del amor y la amabilidad

por Marilu Reyna

La medalla de plata con forma octagonal de Javier Castillo lee simplemente “Love One Another” (Ámense uno a otro). La instrucción más importante de Jesús, la frase es el mantra de Javier y es un recuerdo que, a pesar de tener un pasado difícil que empezó cuando a una joven edad, es importante ser guiado por el amor.

Cuando Javier tenía cuatro años, su mamá perdió su custodia de él y sus hermanos, jamás para reunirse. Desde ese entonces, Javier ahora estima que fue movido más de veinte y cinco veces. Eso significa veinte y cinco familias de cuidado temporal, veinte y cinco escuelas, y por lo menos veinte y cinco despedidas.

“Al principio, el estado hizo un esfuerzo para mantenernos juntos a mi y mis hermanos,” dice Javier hoy a los 21 años, “pero a crecer, se hizo más y más un reto.”

Por una variedad de razones introducidos a sus realidades, desde pequeños los hermanos no han tenido el crecimiento de sus relaciones al llegar de ser adulto. En cambio, un hermano llamará “quizás una vez al año,” dice Javier. Agregado a los cuatro hermanos y la hermana de quienes fue eventualmente separado, ha aprendido que, en total, hay 15 hermanos que comparten su linaje.

Javier pasó su niñez moviéndose entre colocaciones con familias del cuidado temporal; un niño introvertido inyectado a una variedad de ambientes de hogar y escolar. Admite que sintió solo entre sus compañeros de clase, retirándose en sí mismo, y presentándose como tímido y no hablador.

“No tenía amigos, ninguna relación cercana,” acuerda él, recordando afectuosamente a dos compañeras de la escuela primaria, Chrystal y Mia, que buscaron en él la amistad, un encuentro drásticamente diferente de la serie de despedidas de personas que ya había experimentado a la edad de diez años.

“Acuerdo que hablaron conmigo y jugaron conmigo,” dice él. “Me demostraron la amabilidad. Acuerdo siendo asombrado que alguien quería conocerme; que alguien quería ser mi amiga.”

Amplia formación le puede pasar a una persona entre una década, y mientras Javier manejaba su camino hacia una edad adulta, fue aceptado al Hill Country Youth Ranch, un centro residencial de tratamiento y un albergue de emergencia licenciado por el Departamento de Texas para los Servicios para Familias y de Protección para proporcionar el cuidado terapéutico y compasivo a los niños abusados y huérfanos. En el Rancho, Javier finalmente tuvo la oportunidad para desempacar las emociones que resultaron de una niñez nómada con falta a los que él consideraba su familia.

“Fue descompuesto y reconstruido allí,” Javier dice sobre su tiempo en el Rancho, un periodo que describe como una experiencia de “amor constante,” un amor que él dice que lo ayudó empezar una relación con Jesucristo.  

A ser de mayor edad ya no elegible para el Rancho, ni para el sistema de cuidado temporal, aprendió de Our House (Nuestra Casa) de BCFS Health and Human Services-Kerrville, un programa de alojamiento transicional que proporciona vivienda asequible para adultos jóvenes hasta la edad de 25 años que también ofrece a los residentes el manejo de caso, asesoramiento, entrenamiento para la vida cotidiana, y servicios para el empleo y la educación.

Según la Base de Datos Nacional de Jóvenes en Transición, Instantánea de Datos: Texas, el 27 por ciento de los jóvenes de Texas que anteriormente estaban en el cuidado temporal experimentan la falta de vivienda dentro los tres años de haber cumplido la edad de salir del sistema. Consecuentemente, esta población vive en un aumentado riesgo de abuso de drogas y de alcohol y de ser atrapado en la trata de personas.

“Los adultos jóvenes que envejecen fuera del sistema del cuidado temporal tienen un mayor riesgo de quedarse sin hogar,” dice BCFS-Kerrville Director de programas Dennis Ferguson. “Our House fue creada específicamente para nutrir esta población hacia una edad adulta estable e independiente y ayudarles a ser miembros contribuyentes a la sociedad.”

En Our House, Javier logró no solo un lugar seguro para vivir, sino también aprendió las habilidades de la vida integrales de una independencia estable como la financiera personal, la responsabilidad, y consejos para la búsqueda de empleo. Junto con el trabajo clínico que completan los residentes con los manejadores de casos calificados y los consejeros, Our House ayudó a Javier estar mejor preparado por su propia autonomía.

“En Our House, uno aprende pedir ayuda cuando lo necesita,” Javier dice. “Pude hablar con un terapeuta sobre cosas personales, y encontré trabajo como un cuidador de perros, un empleo que me ayudó sentir menos aislado.

“Es difícil para mí para explicar,” continúa él acerca de cómo Our House lo ayudó poner en marcha su éxito, “pero sin Dennis (Ferguson) y Shane (Williams, gerente de casos en BCFS-Kerrville), no podía haber llegado tan lejos.”

“Tan lejos,” para Javier, un nativo de Tejas, es en Kansas City, Missouri, en donde, hoy en día, está completando el internado llamado Fire in the Night (Fuego en la Noche) con el International House of Prayer University, una organización que equipa y habilita los seguidores de Cristo para servir a los pobres y ministrar Su Palabra.

Los internados de Fire in the Night ayudan completar la misión de orar alrededor del reloj, ocupando la sala de oración del campus de medianoche hasta las 6 a.m.

Javier reconoce el inicio de su relación con Cristo como el punto en tiempo cuando empezó apreciar a la historia personal que ha formado el hombre joven que mira en el espejo cada día.  

“No cambiaría ninguna de las experiencias que he tenido, buenas o malas,” él contesta cuando le preguntan sobre cambiar algo del pasado. “He parado de mirar a lo que el pasado me hizo. Ya soy lo suficiente mayor para saber lo correcto de lo incorrecto, y sé que mi futuro está en mis propias manos.

“Quiero ser una persona como fueron Chrystal y Mia para mi hace muchos años pasados en la escuela primaria,” agarrando suavemente el colgante de plata alrededor de su cuello.

“Le quiero demostrar a otros el amor y la amabilidad.”

Mientras estaba en Our House, Javier completó cursos hacia una licenciatura en la biología. El planea continuar su educación con la meta de asistir a una escuela veterinaria.